Tiene sólo el tamaño de una lavadora de platos, pero los inventores tienen la esperanza de que su sonda espacial llegue hasta donde ningún otro artefacto israelí ha llegado hasta ahora: la Luna. Trabajando con un presupuesto mínimo los científicos e ingenieros israelíes que están construyendo el aparato –(temporariamente llamado Gorrión)- piensan que bajará en la Luna hacia fines de 2015, una hazaña sólo lograda hasta ahora por EEUU, Rusia y China. El alunizaje será la tarea más dura del Gorrión, y ...