En las sociedades normales, un empresario que quiere mejorar las condiciones de vida de su pueblo impulsando la economía y creando oportunidades de trabajo para los desempleados –entre los que hay una multitud de licenciados universitarios– es tratado con respeto. La palestina, al parecer, no es una de ellas. Ashraf Yabari es un empresario de 45 años de la ciudad de Hebrón, en la Margen Occidental. Miembro de un importante clan palestino local, Yabari cree en la cooperación económica y en la convivencia pacífica con sus vecinos ...