Egipto, Ucrania, Venezuela. Es la misma lucha, la misma represión. El enemigo es el mismo: el autoritarismo, las dictaduras, que forman un perverso y desvergonzado club en el cual intercambian elogios, solidaridad, galardones, negocios y recetas de métodos represivos. Mubarak, Mursi, los Hermanos Musulmanes, Putin, Lukashenko, Assad, Yanukóvich, Jamenei, Hezbolá, Hamás; todos juegan para el mismo equipo, todos hablan el mismo idioma. ¿No vieron cómo se defienden entre ellos, cómo se llenan la boca hablando de soberanía y no intervención? ¿Acaso vieron ...