El pasado junio las autoridades colombianas neutralizaron un posible intento de asesinato en Bogotá que tenía por objetivo a dos empresarios israelíes y apoyo iraní. En él estaba involucrado un operativo iraní, Rahmat Asadi, que presuntamente habría contratado a dos sicarios colombianos para llevarlo a cabo. Afortunadamente, fue desbaratado, pero reveló que el largo brazo del terrorismo iraní llega a Colombia. La rápida reacción colombiana es aún más relevante si se tiene en cuenta que Israel evitó recientemente otros intentos de asesinato, contra empresarios y turistas israelíes, ...