La situación política y económica de la República de Turquía hace temblar a los principales mercados del mundo, principalmente a las denominadas economías emergentes. La inflación del país ya alcanza la escandalosa cifra del 15%, una política fiscal expansionista disparando el gasto público, una depreciación de la moneda del 40% frente al dólar (moneda de reserva). A esto se suma además una crisis política por la reelección del presidente Erdogan, quien además generó un cambio político en el país para migrarlo ...