Alberto Mazor En esta era digital que todo lo acelera, la historia corre más deprisa que nunca. Mucho más de lo que los tiranos árabes y musulmanes habrían soñado en la peor de sus pesadillas. Antes, las revueltas sociales se gestaban durante generaciones y el efecto dominó tardaba otro tanto en extenderse. Ahora, alguien se inmola en Túnez y prende una mecha que se extiende por todo el islam. Después de Túnez y Egipto, en Irán, Libia, Argelia, Yemen, Jordania, Bahrein y ...