Eduardo Amadeo Febrero 12, 2013 Uno de los peores vicios de la política internacional de un país es ser impredecible. Ni malo, ni bueno; ni de derecha ni de izquierda: ser no confiable es el camino más seguro al aislamiento. ¿Quién va a asociarse con un país que no mantiene su palabra, que puede cambiar su rumbo sin avisar, que no es respetado en el oficio de la diplomacia? Este es tal vez uno de los peores vicios de la lamentable gestión de ...