La decisión de Hezbollah de unirse a la lucha contra las FDI en la frontera libanesa, en paralelo con la guerra de Israel contra Hamás en Gaza, ha despertado mucho descontento y profundas preocupaciones entre los líderes políticos y el público en general en el Líbano, particularmente entre aquellos que no son parte de la población chiita del país. Desde el estallido del conflicto, el Primer Ministro Najib Mikati (sunita) y su Ministro de Asuntos Exteriores, Abdallah Bou Habib (cristiano), han ...