Las pistas del Monte Hermón se habilitaron para los esquiadores, el sitio para la visita de los ansiosos en disfrutar del paisaje blanco y jugar con la nieve. Haifa y otras localidades se cubrieron con granizo. Beer Sheva recibió ocho milímetros de lluvia en una tarde. Y hasta Eilat tuvo noches de menos de siete grados. Los rios del norte mostraron su raudo caudal y el Kineret aumentó su nivel día a día. No implica que haya desaparecido la necesidad ...