“Hay que concienciar al mundo que el problema no es de Israel. Es de todo aquel que quiera ser libre. Es un problema global” El mundo libre tiene un grave problema. Algunos lo reconocen y lo asumen. Otros lo niegan o no lo ven. La civilización judaico-grecolatina esta siendo desvirtuada por el fanatismo radical islámico. Todos los extremos son malos y las democracias occidentales no saben como manejar este nuevo flagelo que asola a la Humanidad. Es tiempo de despertar y abrir ...