Durante años, el régimen revolucionario islámico de Irán se ha acogido al concepto de Occidente de que sus actividades nucleares son estrictamente para fines civiles. Con dicho fin, altos funcionarios iraníes se han aferrado al fatua del líder supremo iraní Ali Jamenei – que no existe – y que dicen prohíbe poseer armamento nuclear en su totalidad (véase el Apéndice del despacho para ver los informes de MEMRI sobre este fatua inexistente). Sin embargo, recientemente se han producido declaraciones frecuentes por parte de ...