Desde la liberación de Jerusalén en la Guerra de los Seis Días, Israel ha permitido al Waqf jordano gestionar la mezquita de Al Aqsa. El movimiento sionista tenía unas estrechas relaciones con la dinastía hachemita desde principios de los años 20, y la pauta se ha venido manteniendo tras la fundación del Estado de Israel, con la excepción de la traición del rey Husein en mayo de 1967, cuando se sumó al oportunista intento de Naser de destruir el Estado judío. No ...